sábado, 4 de diciembre de 2021

Cierro los ojos y te recuerdo feliz en el escenario, junto a los pibes del barrio bailando, haciendo pogo. Esa noche me dedicaste una canción, dijiste algo como "por el aguante de siempre, negro". Te fuiste demasiado pronto de este mundo, hermano. Me pregunto qué estarías haciendo ahora; cómo te sentaría eso que llaman adultez. Te enojarías conmigo, seguramente. No quisieras hablar del pasado, de papá. Me dirías vigilante o algo así. No te gustaría que escuche a Silvio Rodríguez. Quizás tenías razón: nací viejo. Pero recordarte feliz, junto a los pibes del barrio, me hace bien.