domingo, 8 de mayo de 2022

Me gusta llegar temprano, ordenar el aula, subir la calefacción. Poner la fecha en la pizarra; dejarle a cada uno su diccionario en la mesa. Esperarlos en la puerta; charlar un rato con los padres. Luego, cuando terminamos las tareas, espero que los vengan a buscar y vuelvo a casa, atravesando el viento y la ciudad. Vuelvo contento. No lo digo muy seguido por aquí, pero me siento bendecido por estos hermosos diez años de trabajo en el gremio, junto a los niños.